Hola Irma, me gustaría contarte mi historia porque sin querer eres parte de ella
En algún momento del 2018 necesité ayuda, estaba en un país prácticamente sola, todos los aspectos de mi vida (dinero, amor, trabajo, salud) estaban por el suelo y de repente empecé a ver la vida diferente, empecé a cuestionar mi estilo de vida y el de mi entorno, pensaba que la vida tenía que vivirse con propósito y empecé a buscar el mío. Cambié muchas de mis creencias, rompí con algunas ideas limitantes, porque hoy en día sigo rompiendo con otras. Y te encontré en Instagram de “casualidad”. Imagínate, antes de que existiera “en vivos”, Reels, IGTV, y todas esas cosas, cuando tu enseñabas solo a través de una imagen, pero con textos llenos de energía, conecté contigo y tu fuerza.
Empecé entonces a hacer Feng-shui en una habitación que era mi templo hogar, empecé a entender tus explicaciones y seguir el orden de tus instrucciones. Luego cuando me mudé a una casa alquilada de 2 pisos, medí toooooda la casa y empecé con el desinfectante líquido color morado, mi vela roja, mi amanece y agradece, cambiar colores, cambiar formas, bañar el piso con agua, romper la energía de las esquinas, he hecho todo y más.
En octubre 2019 sucedió, el saltó cuántico que cambió mi vida, me aprobaron una beca para estudiar en otro país, y lo más increíble ¿qué banco aprueba un crédito a una persona que tiene cero en su cuenta? Pues me sucedió. Con cero, pero cero unidades monetarias en mi cuenta me aprobaron un crédito y llegué a mi nuevo país el día de mi cumpleaños.
En 2020 cuando empezó el COVID, se nos pararon los planes de rencuentro a mi pareja y a mí, pero yo en una habitación solita seguí con lo que ahora llamo, mi estilo de vida. Medí toda la habitación, busqué mi centro, y dele, a continuar fluyendo con la energía. Octubre 2020 nuevamente, sucedió. Nos reencontramos, desde entonces hemos estado juntos y nos han aprobado todos los papeles que hemos necesitado, y los que no sabíamos que necesitábamos también. Hemos conseguido obtener los empleos que hemos querido.
A veces, amigas que me ven haciendo feng-shui, al principio se burlaban, luego me llamaban rara o me decían que cómo podía gastar ahorros en velas, que si eso era brujería. Después me llamaban para preguntar “¿cuál es que es el desinfectante que tu usas?”. Lo cómico es que ellas van al supermercado y no lo consiguen, voy a cualquier supermercado en cualquier sitio y siempre consigo un desinfectante morado. Aprendí, que como tu dices “no me creas, vívelo y después me cuentas”.
Me costaba entender o internalizar tu frase “por gracia divina te corresponde” y hoy sé que no hay nada que entender, solo queda todo por sentir, sentir la energía, sentir el amor, sentir la fuerzas y no ser impacientes. Seguir alineada y confiar siempre en mí, con muchísima constancia.
Me quedo corta al contarte mi experiencia, solo quería darte las gracias por existir, gracias por ayudar, gracias por compartir, gracias por motivar, gracias por guiar, gracias por ser tu.
Génesis